Jun Martínez se adentra al bosque haciendo un intervalo en su diario para pintar, reflexionar y evidenciar el entorno. Este viernes 16 de diciembre, en la galería Nova Invaliden Galerie en Berlín, Alemania, tendrá su primera exhibición individual fuera de la isla. Sobre esto y otras cosas tuvimos una breve conversación en la galería Walter Otero hace unos días. Al llegar, pudimos curiosear, con mucho respeto y admiración, algunas de las obras del pintor contemporáneo. Ver las pinturas en persona fue algo sorprendente, ya que algunos elementos, como la textura, son un poco difíciles de percibir a través de las fotos, y le dan una riqueza a sus piezas que las hacen destacar. Luego de que llegara y de tomarle varias fotos a Jun y sus cuadros, comenzamos a hablar.
Bueno Jun, quisiera comenzar por saber cómo se dá ese primer contacto entre tú y el arte; la pintura específicamente.
Es un poco difícil decir cómo empezó, porque es algo que siempre estuvo, desde chiquito. Uno trata de ser bueno en algo y pues yo encontré que era bueno en eso.
Quizás antes pintabas algunos temas que ya no, y haz ido adoptando otros. ¿Cómo consideras que ha ido evolucionando tu pintura?
Pues uno va conociéndose, y yo creo mucho que la obra va a ir desarrollándose mientras más uno trabaje. Me gusta pintar mucho, hacer muchos cuadros. Mientras, no solo me voy descubriendo técnicamente, sino también en la cabeza; voy pensando mejor en lo que estoy haciendo y haciéndome más preguntas en el camino. Y pues sí, en ese sentido, no siempre he pintado lo mismo, ni lo voy a hacer.
Respecto al proceso creativo en el paisaje, ya que estás sumergido en él y estás rodeado; ¿Cómo seleccionas ese fragmento que vas a plasmar en el canvas?
Todo depende del espacio que tengo. Viajo liviano, con dos o tres pinturas y el canvas, al lugar. Camino, miro mucho. Incluso, después de que escojo un área y me siento, sigo mirando. No encuadro con los dedos ni nada por el estilo, sino que voy recogiendo información de todo eso que me rodea y, eventualmente, termina en ese espacio que el canvas me permite.
Estos últimos paisajes que has pintado formarán parte de la exhibición que tendrás el 16 de Diciembre en Berlín, Alemania, titulada: Un emboscado. ¿Por qué la titulas de esa manera?
Realmente, el curador de la exhibición, Omar-Pascual, trabajó mucho esa parte. El emboscado es la idea de aquel que se mete al bosque, pero no es solamente el acto físico, sino también lo que puede significar en la cabeza. El asunto, por ejemplo, de salir un momento del espacio de la ciudad, de irse solo y de las reflexiones que se dan ahí. Igual; me voy solo, pero no me aislo, no me enajeno de lo que está pasando.
¿Tienes planes o algunas ideas para tus próximos proyectos?
Seguir pintando, de verdad, y como te dije orita: uno va descubriendo y se va dando cuenta que quiere moverse en ciertas direcciones. Cuando empecé a enfocarme en un asunto y trabajarlo mucho, empecé haciendo retratos, y de la misma manera que me voy al bosque, ahora, y pinto ahí, solía invitar a amigos a que se sentaran conmigo y así hacer los retratos. Luego me llevaba mis amigos al bosque y pintaba con ellos. Ahora estoy trabajando más la realidad del espacio. Esto lo veo más como que estoy visitando lugares y dejando un tipo de testimonio, de evidencia, de lo que pasó cuando estuve allí.
Así terminó nuestra efímera pero agradable conversación. Recogimos, nos despedimos, y agradeciéndonos mutuamente, cada cual continuó con sus quehaceres y con su camino. Esperando que los mismos, en el futuro, vuelvan a coincidir.
Para más información acerca de la exhibición Un Emboscado acceder aquí.
JUN MARTÍNEZ NOW IN BERLIN PRESENTS: An Ambush
Jun Martínez goes deeper into the forest making an interval in his journal to paint, reflect and evidence the environment that surrounds him.This Friday, December 16, in the gallery Nova Invaliden Galerie in Berlin, Germany, he will have his first individual exhibition outside the island. About this and other things we had a brief conversation in the gallery Walter Otero a few days ago. Upon our arrival, we were able to see, with much respect and admiration, some of the works of the contemporary painter.
Seeing the paintings in person was surprising, as some elements, such as texture, are a bit difficult to perceive through the photos, and they give a sort of richness to the pieces that make them stand out. After arriving and taking several photos of Jun and his paintings, we began to talk.
Well Jun, I'd like to begin by knowing how that first contact between you and art, painting specifically, happened.
It's a bit difficult to say how it started, because it was something that was always around, since I was small. One tries to be good at something and then I found that I was good at it.
Perhaps before, you painted some subjects that you no longer paint, and have adopted others. How do you consider that your painting has evolved?
Well, you get to know yourself, and I think the painting is going to keep evolving the more you work. I like to paint a lot, to make many paintings. Meanwhile, I am not only discovering myself technically, but also in my head; I'm start to think better what I'm doing and asking more questions along the way. And yes, in that sense, I have not always painted the same, nor will I do it.
Regarding the creative process in the landscapes, since you are immersed in them and you are surrounded; how do you select the fragment that you are going to put on the canvas?
Everything depends on the space I have. I travel light, with two or three paintings and canvas, to the place. I walk and look around a lot. Even after I pick an area and sit, I keep looking. I don’t make a frame with my fingers or anything like that, but I gather information about everything that surrounds me and eventually, in that space, ends up whatever the canvas allows me.
These last landscapes you have painted will be in the exhibition you will have on December 16 in Berlin, Germany, titled: An Ambush. Why did you titled it that way?
Actually, the curator of the exhibition, Omar-Pascual, worked a lot on that part. The ambush is the idea of one who goes into the forest, but it’s not only the physical act, but also what it can mean in your mind. The matter, for example, of leaving a moment the space of the city, to go alone and the reflections that you learn there. Same; I go alone, but I don’t isolate myself, I don’t alienate myself from what’s happening.
Do you have plans or any ideas for your next projects?
Keep painting, really, and as I told you before, one is discovering and realizing that you want to move in certain directions. When I started to focus on one subject and work at it a lot, I started doing portraits, and just like I go into the forest now, and paint there, I used to invite friends to sit with me and do the portraits. Then I would take my friends to the forest and painted with them. Now I am working more with the reality of space. I see this more like I am visiting places and leaving a kind of testimony, evidence, of what happened when I was there.
That’s how our ephemeral but pleasant conversation ended. We collected our things, said our goodbyes, and thanked each other. Each of us continued with our tasks and parted ways. Hoping that in the future, our paths coincide again.
For more information about the exhibition An Ambush, enter here.
AUTOR
Edwin G. Domenech
Actual estudiante de producción digital en la USC. Le gusta escribir historias y terminarlas, aunque esto último raramente pasa. Disfruta leer, comer pizza y mofongo y la buena compañía. Piensa que estaría chévere que cada cual sólo mandase en su casa. Les desea un lindo día.
Current digital production student at USC. He likes to write stories and finish them, although the finishing part rarely happens. Enjoys reading, eating pizza and mofongo and good company. He thinks it would be cool that everyone commands just at their home. Wishes you a nice day.